Crea un presupuesto para liberarte de las deudas

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El camino hacia la autorrealización empieza por saldar tus deudas. No es una simplificación excesiva. Cualquiera que haya experimentado la carga de la deuda es dolorosamente consciente de cómo las obligaciones financieras le impiden alcanzar sus objetivos vitales.

Vivir por encima de las propias posibilidades es una forma de encarcelamiento. El impago puede provocar que los acreedores presenten demandas o informen de la morosidad a las agencias de calificación crediticia, lo que perjudica aún más la seguridad financiera de uno. Muchos estadounidenses están sintiendo la presión de los excesos, ya que la deuda media combinada de las tarjetas de crédito en EE.UU. es de unos 8.377 $. Algunos tienen incluso decenas de miles de dólares de agujero.

Entonces, ¿cómo pueden los estadounidenses abolir su deuda? Crear y respetar los presupuestos domésticos y priorizar sus gastos.

¿Qué debes incluir en tu presupuesto doméstico?

Hay dos grandes categorías de gastos: los esenciales y los discrecionales. Los esenciales son aquellos gastos que cubren tus necesidades básicas e incluyen lo siguiente:

  • Vivienda: Obviamente, esto incluye el alquiler o la hipoteca; sin embargo, la gente suele olvidarse de hacer un hueco en su presupuesto para los gastos de mantenimiento, los impuestos sobre la propiedad y el seguro de hogar o contra riesgos.
  • Comida: Cubre los gastos de la compra o de comer en casa. Si necesitas ayuda para fijar un límite, puedes utilizar la guía de Planes Alimentarios del USDA. Sus datos indican que el coste mensual medio de las comidas preparadas en casa para una familia de dos miembros oscilará entre los 360 $ del nivel ahorrativo y los 600 $ del plan de coste moderado. Para una familia de cuatro miembros, las facturas de los comestibles pueden oscilar entre unos 560 $ y más de 1.000 $.
  • Servicios públicos: Incluye electricidad o gas y agua.
  • Transporte: Cubre el pago mensual del coche, si lo tienes, el seguro del coche, el mantenimiento, como la sustitución de neumáticos y los cambios de aceite, la gasolina y las tasas de matriculación y renovación de la placa.
  • Asistencia sanitaria: Incluye no sólo la prima mensual de tu seguro, sino también los copagos y otros gastos de tu bolsillo, como los medicamentos sin receta.
  • Ropa: Al fin y al cabo, somos una nación civilizada. Ten en cuenta tanto los artículos de uso cotidiano como la ropa de trabajo o los uniformes.
  • Cuidado personal: ¿Cuánto esperas gastar en productos de higiene personal?

Los gastos discrecionales son todo aquello sin lo que puedes vivir. Esta amplia categoría incluye:

  • Entretenimiento: Puede incluir aficiones, viajes, eventos en directo o películas, y servicios de suscripción como Netflix, Hulu, iTunes Music y cable.
  • Comer fuera merece su propia columna, ya que el estadounidense medio gasta unos 250 $ al mes comiendo en restaurantes y locales de comida rápida.
  • Internet podría incluirse en esta categoría, pero depende de la frecuencia con que necesites acceder a la red y de lo que hagas en línea. Por ejemplo, las personas que trabajan desde casa probablemente necesitarán una conexión a Internet fiable, mientras que a otras que simplemente se conectan para entretenerse puede que les convenga más acudir a la biblioteca local para obtener una conexión gratuita.
  • Los teléfonos móviles, contrariamente a la creencia popular, siguen siendo un lujo en algunos casos. Sin embargo, al igual que Internet, la necesidad de un dispositivo móvil dependerá de tu situación.
  • Varios: compras excesivas, inscripciones en gimnasios, alcohol, etc.

Priorizar: ¿realmente lo necesitas?

Establecer un presupuesto y ceñirte a él priorizando tus necesidades por encima de tus deseos te hará avanzar hacia la libertad financiera. Las prioridades que establezcas dependerán de los objetivos que quieras alcanzar. Si estás intentando pagar una deuda excesiva, tienes que preguntarte de qué puedes prescindir. Sopesa tus opciones: ¿pago del cable o de la tarjeta de crédito, teléfono móvil o ahorros, pago del coche o fondo de jubilación?

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