6 lecciones financieras que debes aprender antes de los 30 años

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Es importante desarrollar pronto hábitos de gasto responsables. Aunque la mayoría de la gente de 20 años ya está endeudada y sus malos hábitos financieros pueden justificarse por la juventud o la educación (o ambas cosas), no obtendrás ninguna simpatía por estos malos hábitos y decisiones cuando llegues al gran 3-0. Si quieres crear una vida estable sin la carga de las deudas, aquí tienes algunas lecciones financieras que debes aprender:

Abre -¡y utiliza! – una cuenta de ahorro

Abrir una cuenta de ahorros antes de los treinta puede ser difícil, sobre todo si ya tienes deudas y te sobran pocos ingresos. Va a haber emergencias y tener una cuenta de ahorros, por pequeña que sea, te será de gran ayuda. Es importante ahorrar el dinero antes de gastarlo. Una forma fácil de aumentar tus ahorros es desviar un pequeño porcentaje de cada nómina a una cuenta de ahorro. Varios bancos online ofrecen tipos de interés más altos que los bancos tradicionales, dándote la oportunidad de aumentar tus ahorros. Quieres asegurarte de que tienes dinero suficiente para afrontar los gastos normales de la vida, pero también necesitas un respaldo.

Lo primero es lo primero: deshacerse de las deudas

Aliviar la deuda debe ser una prioridad. Las tarjetas de crédito son una de las formas más fáciles de endeudarse, pero no son una presencia completamente negativa. Las deudas de las tarjetas de crédito pueden ayudarte a crear crédito, pero tienes que asegurarte de que las pagas a tiempo y no las llevas al máximo. Es habitual que la gente de 20 años esté endeudada, pero si evalúas tu situación y entiendes lo que tienes que conseguir para no tener deudas, puedes elaborar un plan para hacerlas desaparecer.

Haz un presupuesto, fija objetivos y cúmplelos

Planificar con antelación te ayudará a estar más preparado económicamente a largo plazo. Debes marcarte objetivos financieros y hacerte responsable de ellos. Debes saber exactamente en qué necesitas gastar tu dinero, y luego ver en qué lo gastas. No dejes que los demás influyan en tus gastos: ¿te han vuelto a sacar de copas tus amigos? Hay muchas cosas que puedes hacer gratis, divertidas y que no afectarán a tu presupuesto.

Ten paciencia con la creación de crédito

Lleva tiempo construir el crédito, pero puede destruirse en un instante. Hay varios factores que influyen en tu crédito, como el retraso en los pagos, la ausencia de pagos o la apertura de una tarjeta de crédito de una tienda. Asegúrate de pagar siempre las facturas de tu tarjeta de crédito a tiempo, porque los impagos o retrasos en los pagos pueden perjudicar tu puntuación crediticia y aumentar tu deuda. Es importante ser paciente y resistirse a las compras impulsivas. Las tarjetas de crédito de tiendas también pueden dañar tu puntuación porque tienen tipos de interés más altos que la mayoría de las tarjetas de crédito bancarias y generan una «consulta dura» en tu informe crediticio. Estos tipos de tarjetas de crédito te exponen a un mayor riesgo de endeudamiento y son una bandera roja en tu informe crediticio. Di «no» al dependiente que intente atraerte a una cuenta de tarjeta de crédito de una tienda, por muy tentador que sea ese 15% de ahorro extra.

Sacrificio ahora, lujo después

Pregúntate si puedes vivir sin algunas de las cosas en las que gastas dinero. Si recibes un aumento de sueldo o tienes algún tipo de ganancia inesperada de dinero, puedes utilizarlo como una oportunidad para ahorrar más en lugar de gastar. Sólo debes gastar mucho cuando creas que la compra te ofrecerá beneficios a largo plazo.

Controla tus extractos bancarios

Hoy en día podemos acceder digitalmente a casi todo, incluidos los extractos bancarios. Tanto si vas a prescindir del papel como si no, es fundamental que te asegures de que todo tu dinero está donde se supone que debe estar. Hacer un presupuesto es más fácil cuando puedes hacer un seguimiento de tus gastos y ver exactamente adónde va tu dinero. Es fácil ignorar tus propios gastos y dejar que se acumulen cuando la vida se vuelve agitada. Sé diligente al comprobar tus extractos y asegúrate de que te ciñes a tu presupuesto. Sólo se tarda veintiún días en formar un nuevo hábito, así que no tardarás demasiado en implantar un sistema de gestión del dinero exitoso para ti si eres proactivo y tienes en cuenta estas lecciones financieras. No deberías estresarte cuando piensas en el dinero; desarrollar hábitos financieros sólidos es una buena forma de empezar con buen pie. Estas lecciones financieras son una forma estupenda de mantenerte en el buen camino y guiarte hacia mejores decisiones financieras y hacia la estabilidad a largo plazo. Si quieres saber más sobre cómo aliviar la carga de la deuda, ponte en contacto con nuestro despacho para una consulta gratuita.